Historia

Lo que comenzó en 2015 como un pequeño estudio en La Florida, a un costado del metro San José de la Estrella, fue más que un local donde cabían apenas dos personas. Fue un sueño, una apuesta arriesgada, un espacio donde la tinta comenzó a contar historias en la piel. Con el paso de los años, el nombre de Daruma Tattoo Studio fue cobrando fuerza. Lo que alguna vez pareció un humilde rincón para los amantes del tatuaje, pronto se convirtió en un referente.

El crecimiento fue inevitable. La demanda nos llevó a buscar un espacio más grande, a sumar más artistas, a expandir nuestro alcance. Abrimos una segunda sucursal en La Florida, luego en Concepción y Viña del Mar. Queríamos llevar nuestra pasión más allá, acercarnos a más personas, marcar más historias en la piel. Pero los tiempos no siempre juegan a favor. La pandemia y el estallido social golpearon fuerte. Nos vimos obligados a cerrar esas sucursales, a despedirnos de espacios que construimos con esfuerzo y dedicación. Sin embargo, como todo buen artista sabe, cada trazo, incluso el más doloroso, forma parte de la obra final.

Más allá del arte, Daruma siempre ha sido un estudio con propósito. No solo tatuamos, transformamos vidas. Nos convertimos en el único estudio de tatuajes en trabajar directamente con la Teletón, organizando cada año encuentros con colegas para recaudar fondos y aportar a esta noble causa. La tinta, cuando se usa con el corazón, tiene un poder inmenso.

También comprendimos que nuestro arte podía ayudar en la reconstrucción de la identidad y autoestima de muchas mujeres que enfrentaron el cáncer de mama. Junto a cirujanos y médicos, nos unimos en una campaña para realizar tatuajes 3D de areolas a mujeres que pasaron por una mastectomía. Porque un tatuaje no es solo tinta sobre la piel, es un símbolo de amor propio, de renacer después de la tormenta.

Pero nuestra misión no se ha detenido ahí. Creemos en compartir el conocimiento, en formar nuevas generaciones de tatuadores que honren esta profesión. Por eso, hemos realizado cursos y mentorías, guiando a jóvenes artistas en este camino con responsabilidad y dedicación. Porque el tatuaje no es solo técnica, es respeto, es conexión, es dejar huella en la vida de quienes confían en nosotros.

A lo largo de los años, hemos sido respaldados por grandes marcas y figuras que han creído en nuestro trabajo, como La Roche-Posay, Monster Energy, Electrum Ink, el podcast “Tomás Va a Morir” y el artista Claudio Michaux. También hemos tenido el privilegio de aparecer en televisión, llevando nuestra historia y nuestra pasión a más personas.

Hoy, en 2025, Daruma Tattoo Studio sigue en pie, más fuerte que nunca. Contamos con un estudio con dos salones y un equipo de ocho tatuadores altamente reconocidos, que cada día entregan lo mejor de sí para ofrecer tatuajes de calidad excepcional. Pero más allá de la técnica, hay algo que jamás hemos perdido: nuestro espíritu.

Quienes han pasado por Daruma Tattoo Studio lo saben. No es solo un lugar donde se tatúa, es un espacio donde se vive una experiencia única. Un ambiente donde el arte se combina con risas, donde el profesionalismo convive con la calidez, donde cada persona que cruza nuestras puertas se siente parte de algo más grande. La gente nos lo dice una y otra vez: "Aquí no solo me tatuaron, aquí me hicieron sentir en casa".

Y es que, al final del día, Daruma Tattoo Studio es más que un negocio. Es una familia. Una historia que se sigue escribiendo con cada trazo, con cada cliente, con cada sueño convertido en tinta.